- Valorar el marco de programación que ha sustentado las acciones implementadas, en cuanto a los objetivos y estrategias, y su relación con las necesidades y contexto en el que se han desarrollado.
- Analizar la ejecución de los fondos en los períodos programáticos 2000-2006 y 2007-2013, e identificar los principales resultados y efectos que se han dado como consecuencia de las inversiones en las infraestructuras de transporte por carretera y ferrocarril.
- Conocer el impacto sobre los principales agregados (producción y empleo) de la inversión en las infraestructuras de carretera y ferrocarril (análisis TIO).
- Extraer aprendizajes de cara al nuevo marco de programación 2014-2020.
La utilidad de esta evaluación, por tanto, reside en que sus resultados deben servir tanto para el aprendizaje institucional -asentado en las lecciones aprendidas y las buenas prácticas, y el análisis de procesos y puntos de mejoras-, la mejora programática -al contar con información centralizada, estructurada y relevante para la definición de estrategias en el ámbito de las infraestructuras de transporte por carretera y ferrocarril-, como para el rendimiento de cuentas y transparencia -a través de la presentación de resultados e impactos.
Para acometer esta evaluación se aplica una aproximación multisectorial y multidisciplinar que incorpora aspectos económicos, junto a otros de carácter social, institucional y ambiental. En este sentido, se deben tener en cuenta aspectos relacionados con la innovación, competitividad, desarrollo local del tejido empresarial, factores de fomento, de cohesión e integración social, de respeto y preservación del medioambiente, cambio climático, etc.
El proceso de evaluación se ha fundamentado en el análisis de las relaciones de causalidad que subyacen a la intervención, uniendo el Enfoque del Marco Lógico y la Teoría del Programa, lo que ha permitido verificar las Sifuentes hipótesis:
- Reconocer por qué y para qué se realizaron las inversiones, esto es, sobre qué realidad y cómo afectaban los problemas y necesidades. Hipótesis causal.
- Entender los fundamentos que justifican la estrategia implementada como la mejor opción para cambiar/mejorar. Hipótesis de intervención.
- Identificar cómo funcionan los mecanismos de cambios (respuestas generadas por las actividades y acciones desplegadas), bajo qué circunstancias y en qué condiciones. Hipótesis de acción.
La aplicación de las técnicas, tratamiento de la información, análisis de datos y redacción de los informes, ha implicado la triangulación de la información proveniente del análisis documental y del trabajo de campo, para fortalecer los enfoques cuantitativos y cualitativos del estudio y obtener una imagen más completa y plural al utilizar las ventajas de ambos enfoques, minimizando sus debilidades potenciales.